Cada día mueren y renacen partes de nuestro ser.
Cada día múdanos sentimientos como si fuéramos reptiles y de las sobras que quedan nadie quiere vivir.
Porque quien se llevó hasta tu piel ya ni aparece ni quiere aparecer.
“De amor nadie muere”, tienes razón Amiga pero sé que por él respiro cada día.
Estamos hechos del 0,0001% de cosas que por una vez fueron un 100%.
Pero seguimos siendo 0,0001.
Porque tener Suerte un día no te hace afortunado.
Aprendimos que con cada puesta de Sol muere un día, muere una vida, que con cada Sol que se va siempre queda alguna estrella que sigue tirando del carro.
Hasta el corazón se cansa de latir a veces.
Que verte cumplir mi “Ojalá” es mi mayor fantasía y que el camino de vuelta para mí es la única vía.
“Hacia atrás ni para coger carrerilla” y yo no retrocedo, sólo voy de frente a lo que había detrás de mí.
Porque las puestas de Sol nos han enseñado que irse y apagar el mundo es necesario para querer que vuelvas y valorar la Luz que enciende la vida.
A la vuelta de la esquina.
Fotografía de Lorena Ruiz Montes, mil Gracias.